Todos somos un poco raros

Necesitamos explotar las rarezas de nuestro negocio, esa chispa que habita en nosotros y nos hace diferentes.

Eso es lo que atrapará e incitará a que nos compren.

Este libro me ha servido para ver que el mundo cambiante es lo que permanecerá en el futuro. Como negocio, cuanto más específico y adaptado a un nicho de mercado concreto estés, mejor te irá.

Se lo recomendaría a un emprendedor que dude de la importancia de definir a su cliente ideal en un mundo tan cambiante. Lejos de considerar a tu target como general, hay que explotar sus capacidades, rarezas y necesidades concretas para ofrecerle el servicio que necesita.

He aprendido muchos casos de éxito de empresas que se atrevieron a hacer cosas diferentes y atrajeron a una demanda de clientes a los que les gustaba lo que estaba fuera de lo normal. Y es que hoy en día, las personas tenemos el poder de elegir lo que deseemos, ya que lo tenemos a tan solo un clic de nosotros.

En la era digital nada permanece, todo está en continuo cambio día a día. Lo raro es lo nuevo normal. Únicamente aquellas empresas que lo sepan ver van a sobrevivir.